By Wilson Javier Acosta
Las estrategias de marca país se construyen a partir de la perspectiva de cómo el mundo ve al país destino y las expectativas de los turistas al experimentar la oferta de ese país destino. Esta perspectiva se conoce como imagen país y en este sentido, cada país intenta desarrollar su posicionamiento a partir de investigaciones de mercado con turistas que han decidido visitar su territorio. Llamo a este comportamiento “percepción externa aplicativa” porque se trata de un proceso de transformación de la información sobre distintas percepciones de turistas que visitan el país a conocimiento para la elaboración de estrategias de marca país.
La percepción externa aplicativa es el proceso comúnmente utilizado para la formulación de estrategias de marca país. Pero, si en vez de enfocar las estrategias de marca país a las percepciones externas y se comienza el proceso desde las percepciones internas, se lograría obtener una identidad más fuerte para la elaboración de las estrategias que parten de los pensamientos que los mismos habitantes del territorio tienen sobre sí mismos y así, poder mostrar al turista lo que queremos sea recordado por él en su visita.
Denomino a este segundo comportamiento como “percepción Interna aplicativa”. Aunque el uso de este segundo comportamiento no es tan usado como el primero, cabe resaltar su importancia para la generación de identidad y para trazar un rumbo en las estrategias de marca país que se decidan implementar.
Existen distintos caminos para la elaboración de estrategias de marca país y dependiendo el comportamiento aplicado se pueden llegar a distintas estrategias, pero es en el uso conjunto de estas que se complementan las estrategias y se puede llegar a trazar un rumbo para la creación de estrategias innovadoras y eficaces.